Las mujeres son un grupo vulnerable en la sociedad. Al vivir en contextos patriarcales, las féminas se ven expuestas a todo tipo de abuso y violencia, incluyendo las relaciones sexuales forzadas.
En algunos países se ha puesto de moda sedar a la mujer contra su voluntad para violarla. Los violadores asisten a centros nocturnos, bares o discotecas, escogen a sus víctimas y luego dejan caer en sus vasos una droga.
Miles de mujeres han sido víctimas de este accionar violento. Ante las denuncias y el miedo, tres chicas de una escuela en los Estados Unidos, han decidido movilizarse para ponerle punto final a esta situación.
Victoria Roca, Susana Capello y Carolina Baigorri, son las tres estudiantes que idearon unas pajillas para detectar la presencia de drogas en las bebidas. La pajilla tiene un reactivo químico que se activa ante la presencia de algunas sustancias.
Las drogas más usadas son el Rohypnol, la ketamina y el éxtasis líquido. Las tres reducen la capacidad motora, provocan mareos, somnolencia y amnesia.
Ahora las mujeres pueden sentirse más seguras para enfrentar la violencia contra sus cuerpos. Gracias a estas pajillas se reducirán considerablemente los ataques a las mujeres.